La música del siglo XX muestra su inextinguible esplendor debido no sólo a la complejidad de lenguajes y estilos que la caracterizaron, sino también a la coexistencia de expresiones, contenidos y formas extraordinariamente diversos y contrastantes entre sí.

El vértigo creado por el contemporáneo suceder del tiempo y del espacio agudiza y modela los sentidos de tal forma, que obligan y convierten al escucha en un ser necesariamente más explorador, con el fin esencial de hacerlo encontrar no sólo cuanta riqueza encierre lo que a primera vista no se ve, sino también lo que está por descubrirse. Se trata de la necesidad de crear al escucha activo, hacedor de formas y sentidos.

PLANOS podría bien describirse como un museo, una galería de lienzo acústicos que al ser escuchados cobran vida, y aún después de cada audición, permanecen ávidos de atención para contar su historia, unas veces evidente, otras veces más oculta y profunda.

Dejemos que las imágenes plasmadas en esos lienzos sean revelados. Todo está en imaginar y viajar, abriendo el tiempo a fragmentos sensoriales de descubrimiento personal.

Si PLANOS es capaz de abrir un espacio en el tiempo, su existencia será una expedición lograda.

Dejemos que los sonidos construyan su universo… y que ellos mismos nos lo muestren en nuestra imaginación, cuya puerta son nuestros oídos, y cuya fuerza es nuestra capacidad de crear… escuchando.